miércoles, 27 de abril de 2011

Carácter, la sexta herramienta


Ya casi terminando la cuarta semana de temporada hemos disfrutado de una buena arrancada. Apoyados en nuestro cuerpo monticular en los primeros 22 juegos tenemos récord de 15 ganados y 7 perdidos.

De esas 15 victorias 10 han sido viniendo de atrás. Esto demuestra lo que hemos venido pregonando desde los campos de entrenamiento, la importancia de dominar los fundamentos básicos para poder ganar los juegos cerrados. En cada uno de esos juegos podría señalar por lo menos una jugada llamada rutinaria que se hizo o se dejo de hacer y fue clave en el desenlace final del juego.

Otro elemento que sobresale en el equipo es lo que mi amigo Mako Oliveras reconoce como la sexta herramienta, la mente. Las primeras cinco son cualidades físicas como la velocidad, bateo, poder, defensiva y fortaleza del brazo.

La fortaleza mental de un atleta y en este caso de un pelotero de Grandes Ligas es tan o más importante que las habilidades físicas. Tomando en cuenta que en el béisbol profesional se juega casi todos los días por espacio de siete meses, contando los campos de entrenamiento, el temple y determinación del individuo de poder mantener la energía durante el juego es bien difícil.

Bajo estas exigencias unas habilidades físicas promedio con una buena fortaleza mental sobresaliente son suficientes para que un pelotero pueda llegar a jugar en las mayores. Lo inverso también es cierto. Los peloteros con sobresalientes cualidades físicas pero débiles de mente y/o carácter no aguantan el empuje diario de una temporada completa.

En mi opinión esta es una de las razones principales del decaimiento de jugadores puertorriqueños en las Grandes Ligas.

La gran mayoría de nuestros jóvenes carecen de la preparación técnica, física y/o mental para someterse a las largas temporadas que requiere el béisbol profesional. Contrario a nuestros hermanos dominicanos que desde temprana edad juegan o practican el juego siete días a la semana, los nuestros apenas juegan dos juegos semanales y con suerte se reúnen a practicar una vez cuando hay parques disponibles.

Fundamento esta observación con los años de experiencia que llevo trabajando con jugadores profesionales de diferentes nacionalidades, incluyendo a los puertorriqueños.

Lejos de menospreciar nuestro talento, quiero llevar una voz de alerta a todos esos jóvenes con aspiraciones a llegar ser un día jugadores de Grandes Ligas. Esta crítica constructiva la quiero llevar por igual a los entrenadores, padres y organizaciones deportivas. Presten atención a fortalecer el carácter y la fortaleza mental de nuestra juventud y no se limiten al aspecto técnico del juego.

Por otro lado quiero compartir una experiencia inolvidable que tuve este pasado fin de semana cuando los Marlins tuvimos en concierto a los ‘Mulatos del sabor’, El Gran Combo de Puerto Rico.

El maestro Rafael Ithier y Eddie Perez realizaron el lanzamiento de la primera bola previo al encuentro. Aquí tuve la oportunidad de dialogar con ellos y quede bien sorprendido de lo mucho que sabe Don Rafael Ithier de béisbol. Es un fanático acérrimo. En un momento de posar para la foto junto a Don Rafa, sentí como si tuviera nuestra bandera a mi lado y es que El Gran Combo es Puerto Rico.

A mí me gusta mi pueblo, a mi me gusta mi gente. Mi pueblo que tiene herencia, indio, español y africana; mi pueblo que está de pie buscando un nuevo mañana, orgulloso de su esencia latinoamericana.

lunes, 18 de abril de 2011

Corrección:

En la entrada titulada ¡Ya es tiempo!, menciono a Roberto Clemente como el primer latino en ganar el premio del ‘Jugador Más Valioso’. Agradezco al amigo e historiador Jorge Colón Delgado que me corrige e informa que el primer latino en ganar el premio lo fue el cubano Zoilo Versalles en el año 1965. Roberto Clemente fue el segundo.

sábado, 16 de abril de 2011

El Bullpen

Entrando ya en la tercera semana de la temporada regular de Grandes Ligas es obvio que el éxito o fracaso de la temporada recaerá en la actuación de nuestro bullpen.

Muchos fanáticos me han enviado muchas preguntas y/o comentarios referente al bullpen y he podido percibir que una gran cantidad de seguidores del blog no tienen claro cuál es la confección de un bullpen en un equipo.

Por medio de esta entrada pretendo poder explicar en algo y aclarar dudas al respecto.

Primero, la cantidad de lanzadores relevistas que componen el bullpen por lo general son de siete integrantes pero en algunos casos puede haber hasta ocho miembros dependiendo de las necesidades del equipo.

El rol de cada relevista varía dependiendo en cuál entrada del juego se le estará utilizando. Los nombres de los roles son el relevista largo, intermedio, el especialista, ‘setup’ y cerrador.

Comienzo describiendo al relevista largo. Este lanzador debe tener la habilidad de mantener la calidad de sus lanzamientos por espacio de por lo menos tres a cuatro entradas.

En algunos casos este tipo de relevista se le llama para iniciar juegos en caso de alguna emergencia. A este tipo de lanzador que puede comenzar partidos se le denomina como un ‘swingman’, que quiere decir que puede intercambiar roles de relevista a iniciador dependiendo la necesidad.

En el caso de nosotros los relevistas largos son Brian Sanches (con ese) y el venezolano Edward Mujica.

El relevista intermedio tendrá la responsabilidad de lanzar las entradas seis o siete del juego y en algunas ocasiones ambas. En algunos casos los relevistas largos también tienen la habilidad de ser intermedios. En el equipo de los Marlins esto recae en Ryan Webb y Mike Dunn.

El especialista por lo general se enfrentará casi exclusivamente a bateadores izquierdos. Muchas veces se le trae a lanzarle a un bateador pero tenemos que tener a otro relevista ya preparado para cuando termine de lanzar a ese único bateador. Randy Choate es nuestro especialista.

El setup es el lanzador que viene a lanzar la octava entrada. Lleva este nombre porque le estará preparando la escena a su compañero que vendrá a ‘cerrar’ el juego en la novena entrada. Nuestro setup se llama Clay Hensley.

Por último el cerrador. El nombre describe muy bien su responsabilidad. Este lanzador vendrá a ‘cerrar’ o terminar el juego tratando de preservar la ventaja en esa entrada crucial. El dominicano Leo Nuñez es nuestro cerrador.

Tanto el setup como al ‘cerrador’ se le trata de utilizar exclusivamente cuando tenemos la ventaja en el juego.

En otra entrada les explicaré con más detalles cuales son las características necesarias para cada uno de estos roles.

martes, 12 de abril de 2011

¡Ya es tiempo!

El viernes 15 de abril de 2011 se celebra en todos los parques de las Grandes Ligas el legado que dejo el pelotero-humanista afroamericano Jackie Robinson.

En este día los peloteros y todo el personal en el terreno que desee utilizar el número 42 en su uniforme durante el juego pueden utilizarlo como una forma de respeto y agradecimiento a este gran atleta y ser humano.

En la temporada de 1947 Jackie Robinson rompió la barrera racial en las Grandes Ligas llegando a ser el primer pelotero de la raza negra en ver acción en un juego a este nivel.

Este logro de Robinson transcendió más allá de la arena deportiva y tuvo repercusiones en otras áreas de la sociedad norteamericana.

En el 1948 el Presidente de los Estados Unidos Harry S. Truman decidió terminar por medio de una orden ejecutiva la segregación racial prevaleciente hasta el momento en las fuerzas armadas.

El legado deportivo-social de este gran hombre es digno de admiración internacional.

No puedo evitar pensar entre las similitudes de Jackie Robinson y nuestro Roberto Clemente.

Ambos atletas lucharon por la igualdad de los derechos civiles de las minorías. Ambos sufrieron la agonía del insulto constante y amenazas de muerte por su color de piel.

Jackie Robinson fue la persona minuciosamente escogida para romper la barrera de color en las Grandes Ligas. Aunque Roberto Clemente no fue escogido para servir como pionero, logro alcanzar innumerables hazañas entre los latinoamericanos, el reconocimiento no pudo haber caído en mejores manos.

Clemente fue el primer latino en conseguir el premio de ‘Jugador Más Valioso’ en una temporada regular. Además de ser el primero en haber alcanzado los 3,000 hits de por vida. Fue el primer latino en haber sido seleccionado al ‘Salón de la Fama’ y como si fuera poco logro esta distinción sin haber tenido que esperar los 5 años reglamentarios después del retiro para ser candidato a elección. Apenas dos peloteros en la historia del Salón de la Fama han estado exentos a este periodo de espera, Lou Gehrig y Roberto Clemente.

Desde el 1973 la Major League Baseball reconoce la contribución de Roberto a la sociedad habiendo establecido un premio anual el cual recae al pelotero de Grandes Ligas que se destaque por su desempeño humanitario fuera del terreno del juego.

La iniciativa es bienvenida pero ya es tiempo de que se tome el próximo paso, el número 21 de Clemente debe ser retirado de la misma forma que el 42 de Jackie Robinson. Todos los equipos de Grandes Ligas deben retirar el número 21.

Desde hace algunos años ya existe un movimiento dirigido a esta acción. Es una lucha cuesta arriba pero si se unen los sectores apropiados podríamos ejercer la presión debida para que esto se logre.

La Puerto Rico Baseball League ya tomó la iniciativa y retiro hace unos años el número 21 de todos los equipos participantes en el torneo local. Considero que de plantearse la idea en la Confederación de Béisbol del Caribe este movimiento sería considerado seriamente por todas las ligas invernales.

Roberto Clemente dijo una vez; ‘si tienes la oportunidad de lograr algo para beneficio de los que vienen después de ti y decides no hacerlo, estas malgastando tu tiempo en la tierra’. Definitivamente él decidió hacer algo y soy uno de los beneficiados.

Estoy seguro que estas palabras de Roberto transcienden lo deportivo y aplican perfectamente a todos nosotros por igual independientemente la profesión. A retirar el 21. ¡Ya es tiempo!

lunes, 11 de abril de 2011

Gira de 11 días

Son muchos los que me han preguntado sobre la logística y coordinación que tienen los equipos para transportarse de una ciudad a otra.

Brevemente les explico como ejemplo el presente viaje que estamos teniendo en tres diferentes ciudades.

El jueves por la noche luego del último juego que tuvimos en la casa (Miami) contra los Nacionales de Washington viajamos a la ciudad de Houston.

Para estos viajes se utilizan un avión tipo 'charter'. Alquilado exclusivamente para el equipo. No es un vuelo comercial.

El viaje de Florida a Tejas duró dos horas y media. Salimos del aeropuerto de Florida a eso de las 12:45 de la madrugada del viernes. Esto se debió a que el último juego en casa se fue a entradas extras. Aterrizamos en Houston alrededor de las 2:30am (hora de Puerto Rico).

Tan pronto nos bajamos del avión en Houston nos esperan dos autobuses al lado de la pista de aterrizaje del avión. El tiempo que transcurre entre el momento donde se abre la puerta del avión hasta que los autobuses están en movimiento hacia el hotel es de aproximadamente 12 a 15 minutos.

Llegamos al hotel y ya nos están esperando los empleados del hotel con unas mesas de registración ubicadas al lado de los elevadores con las llaves de cada uno de los cuartos.

El primero juego en Houston se jugó el viernes. Ya terminada la serie en Houston en la tarde del domingo salimos del parque hacia el aeropuerto a los 45 minutos luego de terminarse el juego. Nos transportan otra vez dos autobuses.

Antes de abordar los autobuses los agentes de Aduana Federal llevan a cabo todo el proceso de identificación y registro a cada uno de los que abordaran el avión.

El domingo por la noche volamos de Houston a Atlanta para comenzar el martes la segunda serie de la gira.

Luego de terminada la serie de Atlanta de martes a jueves nos trasladamos a Filadelfia después del último juego en Atlanta para llegar entonces a la tercera ciudad de la gira.

Pasamos entonces por el mismo proceso de transportación del parque al aeropuerto.
En Filadelfia jugamos de viernes a domingo. Regresando entonces el domingo por la noche de nuevo a Florida después del último juego en esta ciudad.

En total 3 ciudades y 9 juegos en 11 días.

Rumbo a Atlanta y Filadelfia

Los pasados seis juegos han sido una serie de tres contra los Nacionales de Washington y otra de tres también contra los Astros de Houston.

En total en las pasadas dos series conseguimos cuatro victorias y dos derrotas.
Lo más impresionante y positivo de este inicio de campaña es que de las cinco victorias que tenemos cuatro han sido viniendo de atrás en la segunda parte del juego.

Siempre he considerado como dos características principales de un equipo ganador es la habilidad que demuestren en anotar carreras con dos outs o de venir de atrás para ganar. Hasta el momento los Marlins de Florida 2011 han demostrado ambas.

Comprendo muy bien que todavía es temprano en la temporada pero es importante comenzar de la forma que lo hemos hecho. Especialmente en la división donde se encuentran los Filis de Filadelfia y los Bravos de Atlanta.

Un dato significativo es que estas primeras dos semanas apenas hemos contado con contribución ofensiva alguna de Hanley Ramírez o de nuestro cuarto bate Michael Stanton. El primero porque todavía no ha encontrado su ritmo en su swing y el segundo porque ha estado lesionado la mayor parte del tiempo.

Lo que hemos logrado ha sido mayormente gracias al desempeño de nuestros lanzadores ya que tampoco hemos estado al nivel que esperamos del equipo defensivamente.

Una característica apenas palpable para el fanático común es la unión que demuestra este grupo como equipo. Es refrescante ver como transcurren los momentos en el clubhouse. Divertido, relajado, buena comunicación y muchos graciosos momentos entre ellos. La ‘química’ del equipo es excelente.

Aunque todos los juegos de la temporada son importantes el próximo martes comenzamos las dos primeras series claves de la temporada, la primera contra los Bravos de Atlanta y luego viajamos a Filadelfia.

Luego de estas dos series tendremos una mejor idea de todos los equipos que componen nuestra división este. Los mantendré al tanto.

viernes, 8 de abril de 2011

Marlins, Ángel Pagán y los prospectos

La temporada 2011 de Grandes Ligas ya está corriendo. El equipo ha tenido buenos y malos juegos hasta el momento. No cabe la menor duda de que dependemos grandemente de la actuación de nuestros lanzadores para poder tener éxito en esta temporada.

Otro elemento que será crucial durante la temporada será el poder mantener a los principales jugadores saludables. Esto se debe a que nuestro margen de error es bien pequeño, ya que no tenemos la profundidad en el banco ni en las ligas menores para sustituir a los que están en el róster actual. La organización tampoco tiene el capital para subir la nómina en algún momento que se presente una oportunidad de cambio por un pelotero establecido.

Esto es lo que hace el reto mucho más atractivo y estamos dispuestos a disfrutar las altas y bajas de la temporada.

Por otro lado, tuve la oportunidad de ver en acción a Ángel Pagán y Carlos Beltrán, de los Mets de Nueva York, durante la serie inaugural de tres juegos.

Carlos sigue siendo uno de los mejores bateadores en la liga. En cuanto a Pagán, quedé bien impresionado con lo mucho que ha progresado. Es un jugador completo que puede ganar un juego de diferentes formas.

Ángel Pagán es un ejemplo a seguir de lo que es superación. Se ha transformado de un pelotero promedio a uno de los mejores guardabosques defensivos en las Grandes Ligas, y uno de los más temibles en las bases.

También, son muchos los mensajes que he recibido referentes al estado actual del desarrollo de nuestros jóvenes prospectos interesados en abrirse paso por medio del béisbol.

Algunos padres y líderes recreativos desilusionados me han escrito, otros esperanzados, unos confundidos, otros con una visión clara. En general, muchos comentarios y opiniones variados e interesantes.

De lo que sí estoy seguro es que las organizaciones encargadas del desarrollo del béisbol están realizando un buen trabajo, aunque algunos de sus directivos admiten que pierden gran parte de sus atletas entre las edades críticas de 14 a 18 años de edad.

Algunas de las razones de esta disminución en participación a estas edades son el auge que han tenido otras disciplinas deportivas como el voleibol, balompié, fútbol americano, entre otros.

Otras razones son el desinterés de los jóvenes en continuar en el deporte para invertir más tiempo en otras actividades fuera del terreno de juego; también la falta de interacción de los padres con sus hijos, entre otras razones.

Considero que en los últimos años el Gobierno ha creado talleres con miras a solucionar el problema, pero definitivamente falta mucho por hacer.

Un grupo de pasados peloteros profesionales de la talla de Félix Millán, Dickie Thon, Santos Alomar, padre, Mako Oliveras, entre muchos otros, se han organizado con miras a reunir a entrenadores de béisbol a través de toda la Isla.

Esto podría ser el comienzo de algo bien positivo. La organización lleva el nombre de la Puerto Rico Baseball Coaches Alliance (www.prbcalliance.org)

Estos profesionales ya han comenzado a reunirse con grupos de jóvenes y entrenadores con miras a enseñar a enseñar. Buena suerte.

Como dije en mi pasada columna, aun en estos tiempos difíciles que vivimos, confío en que saldremos adelante.

miércoles, 6 de abril de 2011

Gracias por permitirme representarlos

Los Marlins de Florida están listos ya para comenzar la temporada 2011. Primer inicio de temporada de Grandes Ligas con un dirigente puertorriqueño al mando de un equipo. Sin duda alguna, esto es un logro colectivo. Logro de pueblo y esfuerzo de muchos compatriotas de generaciones más tempranas que la mía.

No puedo evitar si no pensar y agradecer a los que hicieron esto posible para que personas como yo pudiéramos estar en esta posición.

Agradecimiento a los Roberto Clemente, Orlando “Peruchín” Cepeda, Juan “Terín” Pizarro, Luis Rodríguez Olmo, Víctor Pellot Power, Hiram Bithorn, Félix Millán, José “Cheo” Cruz, Santos Alomar, padre, y muchos otros que se encargaron, no de abrir las puertas, sino de empujarlas para que nuestra generación pudiera entrar y conseguir estas oportunidades.

Existen todavía muchas trabas para nosotros las minorías, pero nunca comparado con lo que pasaron estos señores.

Quiero agradecer también a todos esos héroes anónimos, los entrenadores que están desde las seis de la tarde hasta las diez de la noche practicando a nuestra juventud. Gracias a ellos es que existe el béisbol en nuestra isla. Así es que se hace patria.

Puerto Rico ha subido otro escalón demostrando una vez más que podemos si queremos. Esta vez en el campo deportivo, pero ya lo hemos hecho en la medicina, la política, artes, leyes, matemáticas y muchos otros campos intelectuales.

Y a pesar de los momentos difíciles que estamos viviendo como sociedad, necesitamos mantenernos enfocados en lo que queremos como pueblo.

Somos más, muchísimos más los que estamos dispuestos a trabajar por un Puerto Rico mejor. No nos podemos doblegar. Estoy confiado en que al final vamos a salir airosos.

Aunque parezcan utópicas mis palabras, les aseguro que tengo mis pies bien plantados en la tierra. Donde los planté por primera vez por los callejones de mi Playa y el barrio Los Pámpanos de Ponce. Sectores marginados como muchos otros en Puerto Rico, los cuales no nos permiten soñar despiertos. Las pocas alternativas para salir adelante eran el trabajo duro y la escuela.

Quiero terminar, citando la canción “Como Nosotros” del cantautor panameño Rubén Blades dedicada a su barrio:

“...nuestra pobreza nunca conquistó al dinero,
pero en las casas nunca se rindió el yo puedo.
Me iba a la cama con la fe del que ganó,
Me despertaba con la paz del que aprendió,
que lo importante en esta vida es el tratar,
que lo que cuesta es lo que no voy a olvidar.”


Gracias, Puerto Rico, por permitirme representarlos.